San Juan de los Morros.-  Entre campanadas, aplausos y lágrimas, los guariqueños recibieron la reliquia del beato José Gregorio Hernández en la Catedral San Juan Bautista, de la mano del Arzobispo de la Arquidiócesis de Calabozo, Manuel Felipe Díaz Sánchez, la cual va a recorrer toda la región llanera.

El acto inició con una misa de acción de gracias para luego iniciar su paso por las 39 parroquias de la región, la cual permitirá su acceso de los fieles a las celebraciones litúrgicas, bajo un aforo contralado o en adoración a las puertas de la iglesia, tomando las medidas de bioseguridad.

“La Diócesis de Guárico se llena de júbilo por la tan esperada beatificación del Médico de los Pobres”, dijo el prelado, quien agregó que fue uno de los médicos que trabajó durante la gripe española y precisamente fue elevado a los altares durante una pandemia.

Seguidamente, detalló que la reliquia de primer grado contiene un fragmento de la osamenta del “Médico de los Pobres”, la cual fue realizada a base de hierro venezolano, colocaron un microscopio de base, como cuerpo su sombrero y alrededor perlas de Margarita que evocan al rosario.

“Bendigo a la comunidad de Guárico, para que en este tiempo aumente nuestra fe y confianza. Es tiempo de esperanza, esta pandemia pasará”, agregó el Arzobispo.

Por su parte, el monseñor Raúl Ascanio, párroco de la Arquidiócesis de Calabozo, manifestó que la reliquia va a recorrer al Guárico entero, parroquia por parroquia, pueblo por pueblo, dando su bendición a toda la feligresía, la cual permitirá que la población renueve la fe y esperanza.

“Provoca vivir como José Gregorio vivió, el médico bueno, por su bondad, rectitud y fervorosa dedicación a aliviar el sufrimiento humano”, afirmó el monseñor Ascanio, destacando que desde su beatificación el Beato lleva una aurora de la santidad que brilla sobre su frente como un lucero para no apagarse jamás.

La reliquia está contenida en un relicario especial realizado en su honor. Es un microscopio, que representa su faceta como hombre de las ciencias, el sombrero que caracteriza su vestimenta como laico y una aureola, hecha con una camándula con la que rezaba el rosario todos los días. Esto último es la representación de su fe inquebrantable en Dios.

¡Que viva José Gregorio Hernández y bendiga a Venezuela!